viernes, 1 de octubre de 2010

Veintitrés Razones de Izquierda


ⓒLuis Herrera

Una reflexión en caliente sobre los sucesos políticos del 30 de septiembre en Ecuador

Invitado: Fernando López Romero
Historiador

1. El lunes la Asamblea Nacional no reunió quórum y el veto de Rafael Correa (RC) a la Ley de Educación Superior, que había sido consensuada en la misma durante semanas, pasó por fuerza de ley. Esta Ley de Educación busca controlar a las universidades, a las públicas y a las privadas pero resulta muy dura para la universidad pública en las siguientes cuestionas: termina con la autonomía académica, conquista alcanzada por el gran movimiento de Córdoba de 1918 liderado por el socialista argentino Deodoro Roca; reduce el cogobierno de estudiantes y trabajadores, otra de las conquistas de la Reforma de Córdova; da al gobierno de turno el control de órgano de acreditación de las universidades.

Este fue un mensaje muy claro sobre los límites de la Asamblea como espacio de consensos políticos y reveló que el poder de decidir lo tiene RC.


2. Desde el martes la tropa y baja oficialidad de la policía comenzó a organizar la sublevación.

3. El detonante fue la aprobación en la Asamblea Nacional de un artículo de la Ley de Servidores públicos en el que se les quitaría una serie de beneficios económicos y se establecían nuevas regulaciones para la jubilación, la más grave la disposición de que una parte de la misma , el 25 % en el caso de los trabajadores entre los 65 y los 70 años se pagaría en bonos, es decir, se entregaría para provecho de la especulación financiera.. . Frente a esto comenzaron a planificarse, para el viernes movilizaciones de trabajadores del sector público.

4. El jueves en la mañana, los policías se tomaron el Regimiento Quito N 1, el N 2, otros cuarteles en el país, hubo cierre de vías en Guayaquil, Quito, la Escolta Legislativa se tomó la sede de la Asamblea Nacional.

5. Un poco más tarde de las 9, de manera imprevista RC llegó acompañado de un a pequeña escolta y de algunos altos funcionarios al Regimiento Quito N 1. Lugar vecino del Hospital de la policía. Durante la mañana habían comenzado a llegar a este lugar otros policías para sumarse al movimiento.

6. En la puerta del Regimiento, RC tuvo ya un altercado con la mujer de uno de los policías. (Familiares de los policías y policías en servicio pasivo se encontraban ya en el lugar).

7. Uno de los elementos más sensibles para estas personas es la percepción, estimulada por los grandes medios y la derecha, acerca del que en el tema de seguridad los policías tienen menos derechos que los delincuentes. Los policías consideran que las ventajas salariales son una forma de compensación frente a los riesgos que tienen que enfrentar en el desempeño de su trabajo.

8. RC salió a una ventana para dirigirse a los policías. Comenzó reclamándoles su ingratitud cuando dijo que ningún gobierno ha tratado mejor que el suyo a la policía, lo que es cierto. En ese momento, cuando habló de los salarios e alzados uno de los policías le dijo que esa alza había sido en el Gobierno de Lucio. Correa replico y el ambiente fue calentándose hasta que Correa dijo que estaba listo "a que le maten", como todos hemos visto, y dijo que no cedería.

9. Cuando quiso retirarse fue increpado, rodeado y maltratado por la gente. Hubo gases, botellazos, forcejeos, empellones, gritos.

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10. En este momento, al no poder acceder al helipuerto del cuartel, saltó el muro ayudado por sus colaboradores y pasó al hospital de la Policía para ser atendido de la rodilla y de la presión arterial.

11. Es allí cuando fue retenido por los policías pero en las siguientes condiciones: nunca perdió el contacto con el Alto Mando Militar, a tal punto que estuvo al tanto del operativo militar para rescatarle y dio la orden final para el mismo; mantuvo contacto con los colaboradores cercanos ni la prensa gubernamental (no le requisaron el teléfono ni le aislaron); recibió a tres comisiones de los sublevados y durante varias horas les explicó la Ley, motivo de la sublevación; desde allí hizo el llamado a sus partidarios diciéndoles que se encontraba secuestrado, para que movilicen hacia el Palacio de Gobierno y para que le rescaten del hospital. Secuestradores , por decir lo menos, totalmente ineptos lo que revela que no hubo preparación del hecho.

12. En horas de la mañana, asambleas en los cuarteles del ejército de soldados, suboficiales y oficiales de baja graduación analizó la situación y solo después de que decidieron apoyar a Correa pero exigir que la Ley no les afecte se pronunció el Comando Conjunto. Es posible entonces colegir, que no hubo oficiales del ejército implicados previamente en la sublevación. No se prepara de esta manera un golpe de estado sin implicación de por lo menos u una parte de la oficialidad.

13. En la tarde la situación se fue complicando en la zona del Regimiento y del Hospital. La versión al mundo hablaba de un secuestro de Correa, que no estuvo en la planificación previa de los sublevados, y que se dio como consecuencia lógica del desarrollo de unos acontecimientos a los que el propio Correa contribuyó con su error al ir al cuartel, a la boca del lobo, y con su actitud provocadora al dirigirse de inmediato a la tropa sin haberse reunido previamente ni con la oficialidad ni con delegados de los sublevados.

14. Sin respaldo social, el movimiento en la tarde fue debilitándose y concentrándose solo en torno a la retención de RC y al Cuartel centro de la sublevación.

15. En ningún momento los sublevados tuvieron un operativo para controlar centros de comunicaciones. Desde la una de la tarde el gobierno dictó la situación de excepción y controló los medios. Solo cerca de las seis de las tarde un grupo de manifestantes irrumpió, sin tomarse, en las instalaciones de la radio y la TV publica en donde que fueron entrevistados por los periodistas oficiales quienes nunca perdieron el control.

16. en horas de la noche, ante su aislamiento, las negativas del gobierno para ceder y más bien las amenazas de represalias la situación se complicó en el hospital. El operativo militar se produjo en medio de disparos con un saldo de muertos y heridos que hasta este momento es desconocido. La capacidad de fuego de los sublevados, que no tomaron el parque de armas del cuartel, era muy reducida. Al final, los militares sacaron a RC del hospital, dirigiéndose este a un acto con sus partidarios, organizado desde horas de la tarde en la Plaza del palacio de Gobierno.

17. Lucio Gutiérrez, desde Brasil, cuestionó a Correa y dijo que este era el comienzo del fin. Todos los demás representantes de la derecha apoyaron, públicamente, o con su silencio a RC, siendo el pronunciamiento más importante el de Jaime Nebot, alcalde de Guayaquil.

18. Los sectores empresariales y los medios de comunicación apoyaron a RC.

19. Todas las funciones del Estado, y los gobiernos seccionales apoyaron a RC.

20. La mayorïa de organizaciones sociales apoyaron a Correa de manera incondicional y se sumaron a la tesis de que habia que rechazar al golpe de Estado de la derecha, llegando incluso a compararlo con lo de Honduras o con los golpes del Cono Sur.

21. El MPD (sectores estudiantiles y de maestros) se sumaron parcial y brevemente al movimiento intentando obtener réditos, pero fueron rechazados por los propios sublevaos en Quito, Guayaquil, Latacunga.

22. Dos organizaciones de izquierda se pronunciaron por la renuncia de RC, cometiendo un grave error político: Pachakutic y el Polo Democrático, esta última organización tiene influencia en algunos sindicatos del sector público.

23. La CONAIE emitió un comunicado en el que se expresó la visión de su dirigencia histórica de mantener su autonomía y demandas como movimiento, no apoyar la sublevación y exigir al gobierno rectificaciones, posición que expresaron también otros sectores como el de Gustavo Larrea, la Universidad Central del Ecuador, etc.

Hay algunas preguntas que hacerse:

¿Si el gobierno sabía sobre el peligro de un golpe de Estado, por qué RC fue a meterse en sin mayor resguardo, casi indefenso, en el epicentro del movimiento? ¿Por que los aparatos de seguridad leales no tomaron ninguna medida preventiva como capturar a implicados, desbaratar sus líneas de comunicaciones, asegurar el control de lugares estratégicos?

¿Es posible que cosas como estas hayan estado planificadas y que fallaran? descarto esta posibilidad. Es posible que el gobierno construya esta versión de la conspiración en las próximas semanas, pero eso es parte de la lucha política.

¿Por qué los golpistas denunciados, no tuvieron ninguna estructura militar, política ni social de apoyo, lo que redujo la fuerza de la sublevación?

¿Se trata de la primera sublevación en Ecuador de policías por cuestiones salariales? Claro que no, hay una vieja cultura política en este sentido.

¿Cual es la responsabilidad del propio RC en el agravamiento de la sublevación?

¿Un golpe de Estado sin la Embajada Norteamericana dirigiendo la orquesta? Eso fue en Honduras, no lo veo aquí por ninguna parte.

Creemos que es necesario discutir, con toda la seriedad política estas cuestiones. No es posible caer en el impresionismo.

La tesis de un golpe de Estado favorece al gobierno de Correa. En el futuro, toda lucha social, además de ser criminalizada podrá ser acusada de "golpista" y de contrarevolucionaria.

Por mi parte, descarto la idea de que se trató de un golpe de estado, a la luz de los hechos que he relatado. Por lo menos en mi formación política y conocimiento histórico, no tengo memoria de algo así. Creo que se trató de una sublevación sin un mando solido y definido; no niego la presencia de militantes o simpatizantes de Sociedad Patriótica. Esta sublevación devino en una retención-secuestro por el propio desarrollo de los acontecimientos.


No quiere decir que no hayan sectores que quisieran echar abajo a Correa ya y como sea; pero hay que medir la situación concreta más allá de los deseos de algún sector de ultraderecha, de la propaganda gubernamental y de la tradicional paranoia izquierdista.

Rafael Correa ha salido por el momento fortalecido y no hay a la vista rectificaciones en su línea contra los sectores populares organizados, en favor de la minería a gran escala. Su autoritarismo crecerá, mucho más si se le sigue dando un cheque en blanco, ahora en nombre de defender "el estado de derecho".

Por supuesto, esto último parte de un análisis de la situación distinto al de la izquierda sometida a RC, encantada con las políticas sociales dictadas por el Banco Mundial, a las que califican de reformismo al que habría que apoyar.


1 comentario:

fernando mejia dijo...

Muchas gracias Leo, hacía falta un poco de luz.