martes, 23 de septiembre de 2014

De Hombre a Hombre, en una de las últimas funciones














Un día
al final de la función
cuando tenía que acercarme hacia ti
e intentar acariciar con ternura tu cabeza
agaché la cabeza y mi mirada se cruzó con tus zapatos
eran los zapatos de ese niño que interpretabas
con pequeños movimientos
tus pies
me hicieron entender lo joven que eras
aún con tus razones
y tus silencios de hombre doloroso
de historia doliente
eras ese niño que fingías ser

Y la historia te ganaba
y yo tambien me dejaba derrotar
y entendía  que perdía mientras algo triunfaba

Pensé
es el amor
y ya como el ciego de Buenos Aires
no podía ni imaginar
poder ocultarme o huir

Ya te amaba como hoy
y llevaba perdido en tu recuerdo
si saber que tus zapatos
volverían a enamorarme
hasta hacerme llorar